El nuevo hogar de Luciana Salazar: una transformación sorprendente
Luciana Salazar, reconocida modelo y personalidad de la televisión, ha dejado atrás su lujoso departamento en el edificio Chateau Libertador para comenzar una nueva etapa en otro complejo residencial. Este cambio ha generado gran expectativa entre sus seguidores, quienes han estado atentos a cada detalle compartido por Salazar en sus redes sociales.
En sus publicaciones, Luciana reveló que su nuevo hogar promete ser ’40 veces mejor’ que el anterior, con vistas panorámicas que ya ha empezado a compartir con sus seguidores. Una de las imágenes más destacadas muestra la vista del estadio Monumental, expresando así su apego sentimental al lugar. ‘Aunque sea un poco más lejos, el Monumental siempre a la vista de mis ojos’, escribió Salazar, acompañando el mensaje con emojis de una gallina y un corazón rojo.
Emocionantes despedidas y nuevos comienzos
Además de su mudanza, Salazar compartió la emotiva despedida que recibió su hija Matilda de sus amigos del Kinder Club del Chateau Libertador. A través de historias en Instagram, mostró un tierno cartel con el mensaje ‘Te vamos a extrañar’, demostrando el afecto que la pequeña ha dejado en su entorno. Incluso, se organizó una pequeña reunión sorpresa para la pequeña, marcando así el final de una era.
Paula Varela, en el programa Socios del espectáculo, reveló que Luciana había vendido su propiedad a dos famosos vecinos: Wanda Nara y Mauro Icardi. Según la periodista, la pareja de famosos planea instalarse junto a sus cinco hijos en el exclusivo complejo después de algunas remodelaciones. Sin embargo, la verdad es que Luciana Salazar alquilaba la casa, por lo que fue la dueña de la casa quien le vendió la cara a la pareja, obligando entonces a Luciana Salazar irse de su casa.
Un nuevo capítulo en la vida de Luciana Salazar
Luciana Salazar ha compartido su emoción por este nuevo capítulo en su vida. ‘La verdad es que, si bien estábamos súper cómodas en el piso en el que vivíamos desde el 2020, era un poco grande para nosotras dos y nos mudamos a un departamento sólo un poco más chiquito pero en un piso más alto, con mucha luz y una vista soñada’, explicó Salazar. Además, expresó su entusiasmo por vivir en Palermo y mantener las actividades de su hija Matilda. ‘Mi idea es que Matilda continúe con todas las actividades que tiene en la semana -que son muchísimas- y fue hermosa la despedida que le hicieron los chicos del edificio: nunca deja de sorprenderme la capacidad que tiene Matilda de hacerse amigos en todos lados’, confesó Salazar.
Un amor incondicional
Luciana Salazar no puede ocultar su amor y orgullo por su hija Matilda. ‘Matilda es una nena muy cariñosa, mimosa y sensible: en eso somos idénticas. A ella le encantan los besos y abrazos. Yo también soy melosa. Es súper inquieta y reflexiva, también. Cuando se porta mal y yo le pido que piense en lo que hizo y por qué la reté, después de un rato me pide perdón. El otro día alguien le preguntó cómo era ella y se definió: ‘Soy muy buena pero traviesa’. ¡Me hizo reír mucho! También es una nena muy determinada: siempre sabe lo que quiere y va tras ese objetivo’, concluye Luciana emocionada y orgullosa de su pequeña de 6 años.