En el mundo de la política argentina, donde los rumores y las acusaciones parecen ser moneda corriente, el caso de Libra ha captado la atención de muchos. Más allá de los detalles legales y las implicaciones judiciales, este episodio podría revelar un modus operandi particular en la forma de operar de Karina Milei, la hermana del líder libertario Javier Milei.
Según las denuncias presentadas por los legisladores de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro y Mónica Frade, Karina Milei habría jugado un papel clave en facilitar el acceso de ciertos empresarios y figuras del mundo cripto a la Casa Rosada. Esto plantea interrogantes sobre si existiría un tráfico de influencias o un supuesto “cobro de peajes” para reunirse con el presidente y su círculo más cercano.
Más allá de las implicaciones legales, lo que resulta interesante es cómo este caso podría arrojar luz sobre la estrategia de Karina Milei en su relación con su hermano y su entorno político. Según algunas fuentes, Karina es vista como una figura “monje negro” dentro del movimiento libertario, con una imagen que no goza de los mismos niveles de adhesión que su hermano.
En este contexto, el gobierno actual asegura que Javier Milei necesita a Karina cerca “para gobernar”, lo que sugiere una dependencia estratégica entre ambos. Esto plantea la pregunta de si Karina estaría utilizando su posición para facilitar el acceso a su hermano y, en última instancia, beneficiarse de ello.
El Caso Libra: Más allá de las Acusaciones
El relato del caso Libra es, cuanto menos, extravagante. Según las versiones, el empresario Mauricio Novelli y el influencer crypto Manuel Terrones Godoy habrían presentado al inventor de Libra, Hayden Davis, a las autoridades de la Casa Rosada, con la supuesta intermediación de Karina Milei.
La propuesta de Davis era lanzar una memecoin similar a la de Donald Trump, con la particularidad de que parte de las ganancias, supuestamente el 50%, se destinarían a donaciones para emprendedores argentinos. Javier Milei, según el relato, habría aceptado este plan, lo que genera aún más interrogantes.
“Davis ganó 100 millones y debería, según lo acordado, mandar 50 millones (de dólares)”
, es la explicación proporcionada por el entorno de Novelli y Terrones Godoy. Sin embargo, surgen preguntas sobre la falta de un contrato o garantías que aseguraran el cumplimiento de este supuesto acuerdo.
Dispersión y Estrategia Judicial
Otro aspecto curioso del caso es la dispersión de los abogados que representan a los diferentes actores involucrados, como si cada uno se preocupara por su propia salvación. Esto ha generado inquietud en el gobierno, que teme las posibles consecuencias de las citaciones a los implicados.
Cabe destacar que Novelli, quien tiene vínculos con Javier Milei desde hace varios años, es muy cercano a Karina. Esto ha llevado a especular que todas las “heridas” del caso Libra recaerían sobre la secretaria general, dejando al asesor Santiago Caputo, considerado el cerebro detrás de la estrategia de Milei, al margen del episodio.
Implicaciones y Perspectivas
El caso Libra, más allá de las acusaciones y los detalles legales, podría revelar un patrón de conducta en la forma de operar de Karina Milei. Su papel como facilitadora de acceso a las altas esferas del poder, así como su cercanía a figuras clave en el entorno de su hermano, plantean interrogantes sobre su influencia y motivaciones.
En un contexto político donde la transparencia y la rendición de cuentas son cada vez más demandadas, este caso podría tener implicaciones más amplias para el movimiento libertario y la imagen pública de los Milei. Será importante seguir de cerca cómo se desarrollan los acontecimientos y si surgen nuevas revelaciones que puedan arrojar más luz sobre este intrigante episodio.
