Lizy Tagliani está orgullosa de compartir que su hijo Tati ha vuelto al colegio y se encuentra súper feliz. Según cuenta la conductora y actriz, Tati se reencontró con sus compañeros del año pasado y ama ir al jardín. Incluso, invita a sus amiguitos a casa, demostrando lo mucho que disfruta de esta nueva etapa.
Sin embargo, Lizy también revela que Tati tiene un tema de ansiedad, algo que ella misma también padece. “Por ejemplo, tiene natación a las 17.10 horas y yo a las 16.30 ya le digo: ‘¿Vamos a la pileta?’. Claro, está a 2 cuadras de casa. Llegamos en 5 minutos y nos tenemos que quedar tomando un helado en la puerta porque faltan 20 minutos”, explica Lizy. Su pareja, Sebas Nebot, le ha aconsejado hablarle a Tati sobre la pileta unos minutos antes del horario de la clase, para que lleguen a tiempo y sin tanta ansiedad.
Durante las vacaciones de verano, la familia Tagliani/Nebot tuvo un agitado itinerario. Lizy cuenta que se fueron el 16 de diciembre a Villa Carlos Paz, volvieron el 23 para pasar Navidad en Buenos Aires, y el 25 se fueron todos a Córdoba. Sebas se quedó allí hasta el 12 de enero, mientras que Lizy y Tati regresaron a la capital. Los especialistas les recomendaron que Tati no perdiera contacto con su “lugar”, por lo que Sebas viajaba los fines de semana a Buenos Aires o Lizy iba a Córdoba los lunes.
“Será un verano con muchas idas y vueltas pero estoy feliz”
, expresó Lizy, quien ahora se encuentra definitivamente instalada en Buenos Aires, dedicándose a su programa de radio en La Pop y al streaming de Olga.
Adaptándose al Jardín y Superando la Ansiedad
El regreso al jardín ha sido una experiencia positiva para Tati, quien se ha reencontrado con sus compañeros y disfruta de ir a la escuela. Sin embargo, la ansiedad es un desafío que tanto él como Lizy enfrentan juntos.
Lizy reconoce que su propia ansiedad a veces la lleva a actuar de manera impulsiva, como llegar demasiado temprano a la pileta. Pero con el apoyo de Sebas, están aprendiendo a manejar mejor esta situación, buscando formas de ayudar a Tati a llegar a tiempo y sin tanta tensión.
A pesar de los altibajos, la familia Tagliani/Nebot ha logrado encontrar un equilibrio durante el verano, con un plan de idas y vueltas entre Buenos Aires y Córdoba que les permite a Tati mantener su “lugar” y sentirse cómodo en ambos hogares.
Fortaleciendo los Vínculos Familiares
Lizy y Sebas han demostrado ser padres atentos y comprensivos, adaptándose a las necesidades de Tati y buscando soluciones que lo hagan sentir seguro y feliz. Además, el hecho de que Tati invite a sus amigos a casa y disfrute de ir al jardín, muestra que se siente cómodo y valorado en su entorno.
Este viaje familiar lleno de movimiento ha sido una oportunidad para que Lizy, Sebas y Tati fortalezcan sus vínculos y aprendan a manejar juntos los desafíos que se les presentan, como la ansiedad. Sin duda, esta experiencia les ha permitido crecer como familia y adaptarse a las nuevas etapas de la vida de Tati.