La reciente revelación de la pareja de Rubén, el padre de la actriz Flor Torrente, ha conmocionado a la opinión pública. En un emotivo video en redes sociales, Natalia Lezcano rompió el silencio y compartió los desgarradores detalles de la trágica muerte de su compañero.
Rubén, un hombre sano y deportista, no presentaba ningún problema de salud conocido. De hecho, Natalia recalcó que era «supersano, no consumía alcohol ni fumó nunca» y que siempre se mantuvo en forma, incluyendo jugar al fútbol con frecuencia. Parecía que nada podía arrebatarle la vida a este hombre lleno de vitalidad.
Una Tragedia Inesperada
Sin embargo, el jueves 27, durante un partido de fútbol con su hijo Vicente y un amigo, Rubén sufrió una descompensación que le quitó la vida. Natalia recibió la devastadora llamada que cambiaría su vida para siempre: «A las nueve y un minuto recibo el llamado que nos cambió la vida para siempre, donde me dicen que se había descompensado y que lo estaban reanimando. Su corazón se detuvo y ya no se pudo hacer más nada»
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El Legado de Rubén
Aunque la pérdida de Rubén ha sido un golpe durísimo para su familia, Natalia se esfuerza por honrar su memoria y mantener vivo su espíritu. Rubén era un hombre apasionado por la vida, el deporte y su familia, y su viuda está decidida a asegurar que su legado perdure.
A través de este trágico evento, la historia de Rubén nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de aprovechar cada momento. Su repentina partida es un recordatorio de que debemos valorar a nuestros seres queridos y vivir cada día al máximo, tal como él lo hizo.