Luego de haber recorrido el mundo, Wanda Nara ha encontrado su hogar en la Argentina, donde ahora divide su tiempo entre su departamento en el exclusivo Chateau Libertador Residence y su casa en Tigre. En el corazón de su sofisticado hogar porteño, el living se destaca por su elegancia y atención al detalle.
Los protagonistas de este espacio son los imponentes sillones Chesterfield de cuero marrón y una gran lámpara de caireles que ilumina el ambiente. Una elegante alfombra cuadrada gris delimita el área de descanso y reunión familiar, donde se encuentra una gran mesa ratona que invita a la conversación.
En uno de los laterales, un gran espejo dorado antiguo y una cómoda moderna negra sostienen fotografías familiares, objetos decorativos y un velador vintage de cerámica, creando un equilibrio entre lo clásico y lo contemporáneo.
Pero el verdadero tesoro de este living es la espectacular vista que Wanda y su familia disfrutan desde su departamento. Ubicado en el exclusivo Chateau Libertador Residence, con sus 40 pisos y 130 metros de altura, el hogar de Wanda ofrece una vista privilegiada del río y la cancha del Club Atlético River Plate, club del cual ella y sus hijos son fanáticos.
De hecho, el hijo mayor de Wanda, Valentino López, se ha hecho amigo íntimo de Bastián Demichelis, hijo de Evangelina Anderson y Martín Demichelis, quienes también vivieron en este edificio mientras Martín era director técnico de River Plate. Ambos jóvenes comparten la pasión por el fútbol y sueñan con convertirse en jugadores profesionales.
El departamento de Wanda Nara en el Chateau Libertador Residence es un reflejo de su estilo de vida sofisticado y su amor por el diseño. Cada rincón de este elegante living destaca su impronta personal y su conexión con el club que tanto ama.