Maru Botana, la icónica cocinera y conductora argentina, se convirtió en protagonista de un récord histórico al preparar una torta de Rogel de 20 metros de largo en el emblemático Obelisco de Buenos Aires. Este impresionante “Rogelazo” no solo marcó un hito culinario, sino que también buscó llevar un mensaje de esperanza y alegría a los argentinos en medio de tiempos desafiantes.
Un Sueño Hecho Realidad
Según relata Maru Botana, la idea de crear este gigantesco Rogel surgió durante un viaje al Uruguay, donde la receta de su famoso Rogel causó furor entre la gente. Inspirada por la alegría que generó, Maru le propuso a su hijo Agustín y a su equipo llevar a cabo este desafío en el emblemático Obelisco de Buenos Aires. “Queríamos ver esta imagen de una esquina llena de gente, yo soñaba con esto”, confiesa la cocinera.
El proceso de elaboración fue todo un reto logístico. Comenzó en el local de Maru en Pilar, donde se fue armando la torta, para luego ser cuidadosamente trasladada unos 50 kilómetros hasta el Microcentro y terminar de ser ensamblada. La receta requirió de 300 kilos de harina, 80 maples de huevos, 300 kilos de azúcar, 250 kilos de manteca y una tonelada de dulce de leche, una combinación explosiva de sabor.
Secretos del Imponente “Rogelazo”
El Rogel de Maru Botana es una de las recetas más aclamadas de la cocinera, y el secreto de su éxito radica en la delicadeza de la masa y la abundancia de dulce de leche. “El Rogel tiene una masa muy delicada que debe ser finita: lo ideal es ponerle 25 capas de masa intercaladas con dulce de leche y rematar con merengue italiano”, explica Maru.
Pero el “Rogelazo” no solo se destacó por sus dimensiones, sino también por su calidad. “Yo soy fan de la variante tradicional, es decir que no uso el pastelero, por lo que voy contra de lo que suele aplicarse para todas las recetas dulces que llevan este ingrediente. Lo que siempre digo es que lo barato sale caro: por eso -insiste en el tema- siempre hay que usar los mejores productos”, enfatiza la cocinera.
Alegría y Solidaridad en el Obelisco
La presentación del “Rogelazo” en el Obelisco se convirtió en un evento lleno de emoción y celebración. “Tanto amor me mata. Siento una gran emoción. Es fuerte. Trabajo hace más de veinte años con este equipo y ver a tanta gente reunida me hace muy bien. A mí y a todos. Ver tantos argentinos en esta esquina, con tanta felicidad es hermoso”, expresa Maru, visiblemente conmovida.
Pero el evento tuvo también un costado solidario, ya que frente al Obelisco se recolectaron donaciones para las personas afectadas por las graves inundaciones que tuvieron lugar en Bahía Blanca hace dos semanas. Un gesto que refleja el espíritu de Maru Botana, siempre dispuesta a brindar alegría y apoyo a su comunidad.
“Soy una persona que vino a este mundo para ir tras desafíos”, afirma Maru, y este imponente “Rogelazo” es una clara muestra de su determinación y pasión por llevar felicidad a los argentinos a través de la cocina.