Benjamín Vicuña, el actor chileno, ha sido testigo de los numerosos escándalos protagonizados por su ex pareja, la actriz China Suárez. Sin embargo, a diferencia de otros famosos, Vicuña ha optado por mantener un perfil bajo y evitar declaraciones públicas sobre el tema. ¿Cuál es la razón detrás de esta actitud discreta?
Según el análisis de panelistas como Natalie Weber y Sabrina Rojas, la respuesta se encuentra en la personalidad y prioridades de Vicuña. Ellas aseguran que, puertas adentro, el actor siente un “fastidio terrible” ante las situaciones que involucran a su ex, pero que su objetivo principal es preservar la tranquilidad y el bienestar de sus hijos, evitando así convertirse en el centro de nuevas polémicas.
“No quiere decir nada que mañana lo pongan en una pantalla al lado de L-Gante y todos, porque es un lío. Igual él se para hablar, para mí él es muy jugador de fútbol, que tienen un cassette para que las hinchadas no los puteen”
, explicó Sabrina Rojas, haciendo una analogía con la actitud de los futbolistas que evitan provocar a los fanáticos.
La Estrategia de Vicuña: Mantener la Calma y Proteger a sus Hijos
Según los expertos, Vicuña ha adoptado una postura neutral y reservada para no verse envuelto en los escándalos de su ex pareja. Él prefiere resolver los temas “a puertas cerradas” y evitar que sus hijos se vean afectados por la exposición pública. Esta actitud le ha permitido mantener cierta distancia y evitar convertirse en blanco de nuevas polémicas.
Además, Vicuña parece ser consciente de que cualquier declaración suya podría ser malinterpretada o utilizada en su contra. Prefiere mantener un perfil bajo y dejar que los hechos hablen por sí mismos, sin entrar en confrontaciones que puedan perjudicar a su familia.
La Importancia de Priorizar a los Hijos
En medio de los escándalos, Vicuña ha demostrado que su principal preocupación son sus hijos. Él ha optado por preservar la tranquilidad y el bienestar de los niños, evitando exponerlos a más conflictos. Esta actitud ha sido elogiada por los expertos, quienes consideran que es la mejor manera de proteger a los menores en situaciones tan delicadas.
En conclusión, la discreción de Benjamín Vicuña no se debe a una falta de opinión o a una actitud pasiva, sino a una estrategia deliberada para mantener la calma y evitar que sus hijos se vean afectados por los escándalos de su ex pareja. Su prioridad es preservar la estabilidad familiar y evitar convertirse en el centro de nuevas polémicas.