Giselle Rímolo, una figura que alguna vez captó la atención de los medios por sus escándalos y una condena por homicidio culposo, ha logrado dar un giro sorprendente a su vida. Alejada del ojo público, esta mujer ha encontrado una nueva forma de vivir, alejada de los excesos y las controversias que la rodearon en el pasado.
Tras cumplir su condena y obtener la libertad condicional, Rímolo ha optado por mantener un perfil bajo y reconstruir su vida en la tranquilidad de Don Torcuato, donde reside actualmente. Lejos de los focos y las cámaras, se la ha visto en la puerta de su casa, acompañada de sus dos perros y vestida de manera sencilla, con un largo vestido azul y el cabello recogido.
Una Nueva Identidad y Relaciones
Uno de los cambios más significativos en la vida de Rímolo ha sido su decisión de abandonar su nombre mediático y adoptar el apellido de su exmarido, Juan Gaineddu, con quien se casó después de las denuncias en su contra. Además, su presente sentimental también ha dado un giro, pues ahora se encuentra en pareja con un antiguo amigo de su hermano fallecido, Fabián Rímolo, quien siempre fue su mano derecha.
Reinventándose Profesionalmente
En cuanto a su situación laboral, Rímolo ha dejado atrás el centro de estética que manejaba en la zona norte y ahora se dedica a la venta de productos cosméticos a través de plataformas online. Si bien no se trata de productos de su propia elaboración, esta actividad de reventa le permite sostenerse económicamente.
Superando Desafíos de Salud
Los problemas de salud también han sido un factor importante en la transformación de Rímolo. Según informes periodísticos, su estado físico se ha deteriorado con el tiempo, lo que, sumado a su decisión de alejarse del ojo público, la ha mantenido fuera del circuito mediático.
Enfrentando la Percepción de los Vecinos
A pesar de sus esfuerzos por dejar atrás su pasado, la presencia de Rímolo sigue generando incomodidad entre los vecinos de la zona, quienes recuerdan el daño que causó en el pasado. Sin embargo, ella parece estar decidida a seguir adelante y construir una nueva vida lejos de los reflectores.
En resumen, Giselle Rímolo ha logrado reinventarse y encontrar un nuevo rumbo después de años de escándalo y una condena. Su historia es un ejemplo de cómo, con determinación y perseverancia, se puede superar el pasado y construir una vida más tranquila y alejada de los focos.
