No era un partido más. Cuando Argentina y Brasil se enfrentan en el fútbol, el mundo entero detiene su mirada. El martes 25 de marzo, en el Estadio Monumental de Buenos Aires, se vivió una noche histórica para la Selección Argentina. Ante 85,000 fanáticos locales y 2,000 brasileños, la Scaloneta no solo ratificó su paternidad sobre el eterno rival, sino que también se clasificó con un año y medio de anticipación para la Copa del Mundo 2026 a celebrarse en México, Estados Unidos y Canadá.
La Goleada y la Paternidad Confirmada
Desde el inicio, Argentina impuso su ritmo y a los 4 minutos Julián Álvarez abrió el marcador con un gol que emulaba al Hombre Araña. Luego, Enzo Fernández amplió la ventaja a los 12 minutos. Cuando parecía que Brasil reaccionaba con el descuento de Matheus Cunha, Alexis Mac Allister marcó el 3-1 tras una jugada de 33 pases. Finalmente, Giovanni Simeone sentenció el 4-1 final, convirtiendo su primer gol con la Albiceleste.
Con este triunfo, Argentina superó a Brasil por dos victorias en el historial de enfrentamientos, confirmando su paternidad sobre el eterno rival sudamericano. Un hecho que llenó de orgullo a los fanáticos argentinos presentes en el Monumental.
La Clasificación Anticipada al Mundial 2026
Pero la noche no terminó ahí. Gracias a este resultado, la Selección Argentina se clasificó con un año y dos meses y medio de anticipación para la próxima Copa del Mundo. Un cartel gigante en el estadio anunció la noticia, desatando la euforia de los hinchas que soñaban con volver a ver a su equipo levantar la ansiada copa.
La noche se completó con fuegos artificiales, la celebración de los cuatro títulos obtenidos por el equipo de Lionel Scaloni durante la gestión de Chiqui Tapia al frente de la AFA: el Mundial, dos Copas América y una Finalissima.
“Ir a ver al equipo de Lionel Scaloni es la nueva linda costumbre nacional”
, expresó un fanático argentino, reflejando el sentimiento de todo un país que vive un sueño del que no quiere despertar.