Soledad Pastorutti, hoy una de las artistas más aclamadas de Argentina, tuvo que enfrentar momentos difíciles al inicio de su carrera cuando el folklore era un género dominado por los hombres. En una entrevista sincera, la cantante reveló que sufrió insultos, agresiones e incluso que le arrojaron piedras en algunos festivales donde predominaban los varones.
“¿Vos te creés que nunca viví que me hayan tirado una piedra o me hayan puteado? Sí, todo”
, confesó Pastorutti, dejando en claro que su irrupción en el mundo del folklore, con su estilo enérgico y su famoso poncho, generó rechazo en ciertos sectores machistas.
Superando el Prejuicio y el Odio
La Sole explicó que en sus inicios, el folklore era un género dominado por los hombres, y su presencia como una mujer joven y talentosa fue vista con desaprobación por algunos. “Los festivales a los que iba eran muy machistas. El folklore era de los hombres, yo era una nena y revolvía el poncho, algo inusual en esa época”
, relató.
Pastorutti recordó que la época en la que más hate recibió fue durante su adolescencia, cuando aún no existían las redes sociales. “Mi peor edad fue la adolescencia, pero en ese momento no había redes… Me mandaban cartitas”
, reveló.
Comprendiendo las Críticas
Con el tiempo, la artista comprendió que muchas de las críticas que recibía provenían de la ignorancia y el prejuicio, pero no fue fácil. “A mí me costó mucho entenderlo en ese momento”
, admitió.
De la Resistencia al Éxito
A pesar de los ataques y la resistencia inicial, Soledad Pastorutti se impuso con su talento y logró cambiar la historia del folklore argentino. “Popularizó el folklore y le ganó al hombre que hacía folklore. Mostró la bandera de que una mujer podía cantar muchísimo mejor que un hombre”
, analizaron en el programa.
Hoy, su imagen está ligada al poncho, un símbolo que alguna vez generó burlas, pero que terminó convirtiéndose en su sello personal. “Todos tenemos un poncho, y cuando lo movemos, es por la Sole”
, afirmaron con orgullo.
De la Adversidad al Ícono
Los ataques, las piedras y los insultos quedaron atrás. Soledad Pastorutti no solo resistió, sino que se convirtió en un ícono de la música argentina. “El talento de la Sole habló por sí solo”
, concluyeron en el programa.
Hoy, a sus 45 años y con casi tres décadas de carrera, Soledad Pastorutti sigue llenando escenarios y demostrando que el folklore también es territorio de mujeres.