Momi Giardina, la carismática co-conductora de Nadie Dice Nada, se convirtió en el centro de atención después de relatar una increíble anécdota sobre el robo de su auto. Sin embargo, lo que parecía ser una pesadilla terminó convirtiéndose en una aventura inesperada.
Todo comenzó el día de su cumpleaños, cuando Momi dejó su auto estacionado en un lugar que, según sus propias palabras, “olvidó por completo”. Dos días después, cuando intentó retomar su vehículo, se encontró con una sorpresa desagradable: ¡el auto había desaparecido!
Lejos de entrar en pánico, Momi se puso manos a la obra para resolver el misterio. Primero, acudió al depósito de acarreo, pero allí le informaron que su auto no se encontraba. Decidida a no darse por vencida, la influencer recorrió el barrio en busca de pistas, hasta que finalmente, con la ayuda de su pareja, logró localizar el vehículo estacionado en la misma zona donde lo había dejado.
Sin embargo, la historia no terminó ahí. Cuando Momi y su prometido se acercaron al auto, se encontraron con una escena digna de una película policial: la policía les informó que el vehículo tenía un pedido de captura. Aparentemente, el auto había sido utilizado para cometer algún delito, y las huellas de Momi podrían ser un problema.
Lejos de rendirse, Momi se mantuvo firme y decidida a recuperar su auto. Después de un proceso burocrático y algunas llamadas telefónicas, finalmente logró que le devolvieran el vehículo. Pero la sorpresa no terminó ahí: según la policía, alguien había arrojado “polvito blanco” en el interior del auto, con la intención de hacer creer que Momi estaba involucrada en alguna actividad ilegal.
A pesar de la tensión y el estrés que vivió durante todo el proceso, Momi Giardina logró mantener su sentido del humor y su característico estilo directo. En sus propias palabras, “parece ser que yo lo dejé encendido, lo agarraron, lo dejaron ahí y chau. No me sacaron nada, ni la rueda de auxilio. Capaz fueron unos pendejos jodiendo… Me lo dejaron bien estacionado.”
Esta increíble historia de Momi Giardina demuestra que, incluso en los momentos más difíciles, es posible mantener la calma y encontrar una solución. Su determinación y su sentido del humor la ayudaron a superar este desafío y a recuperar su vehículo, dejando a sus seguidores con una anécdota digna de ser contada una y otra vez.