La provincia de Buenos Aires, el bastión electoral del peronismo, se encuentra en un estado de ebullición política sin precedentes. La batalla a muerte entre Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador Axel Kicillof ha escalado a niveles impensables, y parece inevitable que se traduzca en una división del voto peronista en tres elecciones distintas: las PASO y la elección general para cargos legislativos provinciales, seguidas de la elección de diputados nacionales.
La Disputa por el Poder
Kicillof, aferrado a su intención de desdoblar el calendario electoral para desnacionalizar la contienda, se enfrenta a una Cristina Fernández inamovible en su decisión de retener la autoridad del partido y no compartir las decisiones ni separar el debate local del nacional. Ambos bandos van a fondo en esta pelea, que no solo determina quién tendrá la lapicera para la elección local, sino también quién será la referencia política en la provincia de Buenos Aires de ahora en más.
La escalada de amenazas cruzadas entre Axel y Cristina ha llegado a un punto sin retorno, y los analistas coinciden en que la ruptura es prácticamente un hecho consumado. La principal incógnita ahora es si la interna se resolverá en las PASO o si la división será total, con frentes separados y una división del voto peronista que podría beneficiar enormemente a Javier Milei y su partido La Libertad Avanza.
El Escenario Político
Según los pronósticos, Axel Kicillof intentará convocar a la elección local en agosto o septiembre, aunque para que eso suceda aún faltan algunos movimientos en un tablero en el que hay muchos actores pero solo dos contrincantes reales: Cristina y él mismo.
En este contexto, Sergio Massa, referente del massismo, ha quedado expuesto al intentar equilibrar entre Cristina y Axel. Ahora, junto con La Cámpora, busca reunir los dos tercios de los votos en la Legislatura local para impulsar un proyecto de ley que elimine las PASO y fije la elección provincial junto con la nacional, en línea con los deseos del cristinismo.
El Papel de Milei
La división del voto peronista en la provincia de Buenos Aires, el distrito más importante del país, le ofrece a Javier Milei una oportunidad única e impensada de lograr un triunfo electoral. El líder de La Libertad Avanza se frota las manos y espera, mientras observa cómo la feroz disputa entre Cristina y Axel abre las puertas a su ascenso político.
«Va a haber PASO pero vamos a ir en dos frentes distintos. Ella nos gana a nosotros en la Tercera, pero el resto de las siete elecciones se las vamos a pelear porque en el interior está mejor Axel. Aunque en todas nos va a terminar ganando Milei a los dos»
, vaticinan en un municipio de la Tercera Sección Electoral, la más poblada de la provincia.
Con tanto en juego, la palabra de Cristina Fernández ya opera sobre el escenario, y algunos de los intendentes que rodean a Kicillof temen que la expresidenta pueda amenazar sus distritos si decide lanzarse como candidata a legisladora provincial por la Tercera Sección.
La batalla por el poder en la provincia de Buenos Aires se ha convertido en un espectáculo político de alto voltaje, y el resultado final podría sorprender a todos, con Javier Milei emergiendo como el gran beneficiario de la feroz disputa entre Cristina y Axel.
