En un hecho que conmociona a la comunidad de San Francisco Solano, en la provincia de Buenos Aires, un niño de 12 años se vio obligado a tomar una decisión drástica para salvar a su madre de la violencia de su padrastro. La tragedia se desencadenó cuando el menor presenció cómo su padrastro, de 37 años, golpeaba brutalmente a su madre dentro de su propia casa.
Según la reconstrucción de los hechos, el niño, que será identificado como “S.” para proteger su identidad, actuó en un estado de desesperación al ver a su madre siendo sometida a una paliza. Tomando un cuchillo, el menor apuñaló a su padrastro, Rubén Adrián Cardoso, al menos cuatro veces, lo que resultó en la muerte del hombre. Fuentes oficiales confirmaron que en esa vivienda había antecedentes de violencia doméstica.
El periodista Mauro Szeta, experto en temas policiales, explicó que el niño de 12 años no será sometido a proceso penal debido a su edad, ya que se considera que actuó en defensa propia y para evitar un posible femicidio. “Evitó un femicidio”, afirmó Szeta, destacando que la ley ampara este tipo de acciones cuando se trata de salvar la vida de un tercero.
Las imágenes del interior de la casa y de los cuchillos utilizados en el crimen fueron mostradas al aire, revelando la desesperada situación que enfrentaba la familia. La cocina, el baño y uno de los dormitorios de la vivienda fueron escenarios de esta tragedia que pone de manifiesto la necesidad de abordar de manera integral la violencia de género y doméstica.
Este caso resalta la importancia de brindar apoyo y recursos a las víctimas de violencia, así como de fortalecer los sistemas de protección para los menores que se ven involucrados en situaciones tan traumáticas. La valentía y el instinto de supervivencia de este niño de 12 años, que actuó para salvar a su madre, es una muestra de la desesperación que pueden enfrentar los más vulnerables ante la violencia intrafamiliar.
