Luciana Salazar, la reconocida modelo y figura pública argentina, se ha visto envuelta en un escándalo relacionado a sus ingresos mensuales. Según reveló Yanina Latorre, Salazar es monotributista categoría A, la más baja, y solo tributa 650 mil pesos por mes. Sin embargo, su estilo de vida lujoso y los gastos que conlleva parecen no coincidir con esta cifra.
Latorre afirmó que el último contrato que tuvo Salazar fue en 2023 y solo cobró 23 mil pesos. Esto ha generado numerosas interrogantes sobre cómo la modelo logra solventar su vida en un lujoso departamento en Nordelta, pagar el colegio de su hija, los tratamientos de belleza y demás gastos que se asocian a su imagen pública.
Una de las posibles explicaciones que se barajan es que Salazar podría estar recibiendo ingresos adicionales que no estarían siendo declarados. Esto la convertiría en una evasora de impuestos, algo que Latorre no dudó en señalar al calificarla como “burra, ignorante e inútil”.
Los Secretos Detrás de los Ingresos de Luciana Salazar
Más allá de las acusaciones, lo cierto es que Salazar ha logrado mantener un estilo de vida lujoso y ostentoso a lo largo de los años. Esto ha llevado a especular sobre posibles ingresos ocultos o acuerdos de patrocinio que podrían estar complementando sus bajos montos declarados.
Algunos expertos sugieren que Salazar podría estar recibiendo dinero en negro por su participación en eventos, publicidad o incluso arreglos con políticos a los que se ha vinculado en el pasado. Esto le permitiría mantener su estilo de vida sin tener que declarar la totalidad de sus ingresos.
La Exposición de su Hija: ¿Una Estrategia de Distracción?
Otro punto controversial es la exposición de la hija de Salazar en redes sociales y medios. Latorre acusó a la modelo de utilizar a su hija como una forma de desviar la atención de sus propios asuntos financieros.
Según Latorre, Salazar “reclama que no nombre a su hija, pero la expone ella cuando habla y muestra”. Esta estrategia podría ser una manera de distraer al público de las preguntas sobre sus ingresos y su nivel de vida.
Conclusión: ¿Luciana Salazar, ¿Una Maestra de la Evasión Fiscal?
El caso de Luciana Salazar ha puesto en evidencia la discrepancia entre su estilo de vida y los ingresos que declara. Mientras que ella se muestra como una figura de lujo y glamour, los montos que tributa al fisco parecen no ser acordes a su realidad.
Esta situación ha generado sospechas sobre posibles prácticas de evasión fiscal y ha puesto en tela de juicio la transparencia de sus finanzas. Será interesante ver cómo se desarrolla este escándalo y si Salazar logra dar explicaciones convincentes sobre la forma en que sostiene su lujoso modo de vida.
