Germán Palacios es uno de esos actores cuya trayectoria se ha entretejido en la memoria colectiva a través de décadas de producciones cinematográficas, televisivas y teatrales. A pesar de ser un clásico de la escena, poco se sabe realmente sobre él, ya que ha optado por mantener un perfil bajo y una vida privada alejada de los reflectores.
Ahora, Palacios se prepara para volver a los escenarios con un doble rol: dirigir y actuar en la obra El hombre inesperado, que se estrenará el próximo 11 de enero en el mítico Teatro Maipo. La pieza, escrita por la aclamada dramaturga Yasmina Reza, cuenta la historia de “dos soledades que coinciden en un vagón de tren”.
“Lo que me pasó con este texto, básicamente, es que es una obra de Yasmina Reza. Hace unos años, con Ricardo Darín nos sucedió algo respecto de ART: aprendimos. Somos como una especie de exegetas de esta autora, conociendo la artesanía de su estructura que es sofisticada y difícil de interpretar porque escribe un guión puro y crudo sin acotaciones”
, comenta Palacios en una entrevista exclusiva.
Dirigir y Actuar: Un Desafío Creativo
Palacios y su coprotagonista, Inés Estévez, asumieron el reto de dirigir la obra, algo que surgió de manera natural a partir de su profunda conexión con el material.
“Fue algo que sucedió espontáneamente porque, a partir de la lectura del material y de hablar sobre eso, nuestros acuerdos de cómo encarar esta obra eran tan grandes que sentimos que podíamos lanzarnos al juego de dirigirla porque estábamos cómodos”
, explica Palacios.
Para él, la dirección es algo que siempre ha estado presente en su carrera, a pesar de tener más experiencia como actor dirigido. “Los actores, hoy más que nunca, estamos formados creativamente para tomar decisiones sobre nuestro trabajo actoral. Hay que poner todo lo que sos en la lectura de un papel, desde tu forma de ser a tu ideología, y ver que todas esas partes puedan encastrar”
, afirma.
Una Vida Privada Protegida
Germán Palacios es conocido por mantener un perfil bajo y evitar la exposición mediática. Esto se debe a una decisión consciente de priorizar su vida personal y familiar.
“Yo no tengo exposición. Me llevo muy bien porque tengo una vida privada. Tengo una vida, soy feliz con mi familia y me gusta que esos aspectos sean privados. No me gustan los reportajes”
, confiesa el actor.
Palacios lleva una relación de 26 años con la también actriz y directora Marina Glezer, con quien ha construido una sólida unión y una familia. “Es una gran compañera. La llama está encendida a full. Estamos abiertos al intercambio. Esperamos la opinión del otro, nos apoyamos y nadie se enoja”
, revela.
Aprendizaje y Sensibilidad Social
Además de su trayectoria artística, Palacios destaca la labor social y de militancia de su esposa, quien trabaja con personas en situación de vulnerabilidad. “Es una gran militante que trabaja en el orden social con la gente que más necesita. Eso, para mí, es un aprendizaje muy grande. Es una persona que se arremanga y va a lugares a donde muchos no quieren ir”
, expresa con orgullo.
Esta sensibilidad social se refleja también en el personaje que Palacios interpreta en El hombre inesperado, quien realiza una interesante autocrítica sobre sí mismo y su lugar en el mundo.
A pesar de su éxito y trayectoria, Germán Palacios se mantiene agradecido y contento con su carrera y su vida personal, demostrando que el verdadero talento trasciende los reflectores.
