La serie que lleva por título Adolescencia no es realmente sobre los jóvenes, sino sobre la profunda crisis que enfrentan los adultos en la actualidad. Lejos de ser una simple etapa de la vida, la adolescencia se ha convertido en un síntoma de época que expone las carencias y confusión de una generación de padres y autoridades que parecen haber perdido el rumbo.
En lugar de abordar los estereotipos habituales de la adolescencia, como el sexo irresponsable, las drogas o los trastornos alimenticios, la serie se centra en un caso extremo de psicopatía precoz. Un joven de 13 años que asesina a una compañera de clase, dejando a su familia y a la comunidad escolar completamente perplejos. Pero el verdadero foco no está en el crimen en sí, sino en la incapacidad de los adultos para comprender y manejar la situación.
Adultos Desorientados y sin Autoridad
A medida que la trama se desarrolla, queda claro que los verdaderos protagonistas de esta historia son los padres, maestros y autoridades que se enfrentan a una realidad que no logran entender. Incapaces de intervenir de manera efectiva, se limitan a ofrecer “salas de apoyo al duelo” y gestos simbólicos, mientras se cuestionan constantemente si están siendo buenos padres.
Los adultos que negocian con sus hijos si van o no a la escuela, que ante un asesinato proponen una “sala de apoyo al duelo” como si un par de sillones pudieran recomponer lo irrecuperable, son los verdaderos protagonistas de esta historia.
La Pérdida de Autoridad y Asimetría
La serie muestra cómo los adultos han perdido la capacidad de ejercer su autoridad y establecer la asimetría necesaria en la relación con los adolescentes. En lugar de intervenir y guiar, se limitan a lamentarse y buscar manuales de instrucciones para una tormenta que no logran entender.
Incluso cuando el propio hijo del policía a cargo le explica cómo funcionan las dinámicas en la escuela y las redes sociales, el adulto se siente perdido y abrumado, incapaz de procesar esa realidad tan ajena a su experiencia.
La Adolescencia como Espejo de la Crisis Adulta
Lejos de ser una serie sobre la adolescencia, Adolescencia es un reflejo de la profunda crisis que atraviesa la adultez en la actualidad. Los jóvenes ya no son vistos como una etapa de transición, sino como un estado generalizado de la sociedad, donde los adultos parecen haber perdido su brújula y su capacidad de guiar.
La serie no solo expone las carencias de los padres y autoridades, sino que también cuestiona la idea misma de la adultez. ¿Qué significa ser adulto en un mundo donde la asimetría y la autoridad parecen haber desaparecido? Esta es la pregunta subyacente que late en cada escena de Adolescencia.
Hacia una Nueva Comprensión de la Juventud
Más allá del impactante crimen que desencadena la trama, la serie nos invita a reflexionar sobre cómo la crisis de la adultez se refleja en una juventud cada vez más empoderada y desafiante. Lejos de ser un problema exclusivo de los adolescentes, la “adolescencia” se ha convertido en un síntoma de una sociedad que ha perdido sus referentes y su capacidad de guiar a las nuevas generaciones.
Para navegar esta nueva realidad, los adultos deberán replantearse su rol y desarrollar estrategias efectivas que les permitan recuperar la autoridad y la asimetría necesarias para acompañar a los jóvenes en su desarrollo. Solo así podrán hacer frente a los desafíos que plantea una adolescencia cada vez más desafiante y empoderada.