En medio de una acalorada disputa entre el abogado Roberto Castillo y su excliente Flor Moyano, ambos han expuesto sus versiones de los hechos, revelando una historia más compleja de lo que parecía a simple vista. Mientras Moyano acusa a Castillo de manipulación y abandono durante su defensa en la causa por abuso sexual contra Juan Martino, el abogado se defiende afirmando haber actuado con integridad y respeto profesional.
Según Castillo, en todo momento se comportó con prudencia, incluso protegiendo a Moyano frente a los medios de comunicación, incluso después de haber decidido renunciar voluntariamente a su representación. Afirma que esperó el tiempo necesario hasta que Moyano encontrara a alguien que la acompañara en el mismo rol. Sin embargo, ante los “reiterados ataques públicos” de Moyano y su actual abogado, Castillo se vio en la necesidad de ejercer su derecho a dar respuesta y defender su buen nombre.
Por su parte, Moyano asegura haber sido “manipulada, expuesta y revictimizada” por Castillo, a quien acusa de haberla “atado legal y emocionalmente” y de haberla “abandonado” y “dejado sola” durante el proceso judicial. Agradece a quienes tuvieron la “valentía de hablar” y afirma que la “verdad sana” y el “tiempo” finalmente acomodarán todo.
En esta disputa, ambas partes parecen tener su propia versión de los hechos, lo que evidencia la complejidad de la situación. Mientras Castillo defiende su integridad y profesionalismo, Moyano afirma haber sido víctima de manipulación y abandono. La verdad, sin duda, se encuentra en algún punto intermedio, y solo el tiempo y la justicia podrán determinar quién tiene razón en esta polémica.