La China Suárez y Nicolás Cabré atraviesan uno de los momentos más especiales de sus vidas como padres. Su hija Rufina acaba de debutar en la séptima división del club donde juega, y ambos no pudieron contener la emoción.
A pesar de su separación hace 13 años, la pareja ha logrado mantener una relación sana y comprometida con el bienestar de su hija. A diferencia de otros ex, Cabré y Suárez han sabido transformar su vínculo en una hermosa amistad de padres separados, siempre presentes en los momentos importantes de la vida de Rufina.
El debut de la joven futbolista fue un hito especial, ya que a sus 11 años logró ser ascendida a la división de 13 a 14 años, demostrando un talento excepcional. Tanto la China como Nico se deshicieron en elogios y orgullo por los logros de su hija.
“Celebrando tus logros mi ratón. Te mereces todo lo lindo”
, expresó Suárez en una conmovedora publicación en redes sociales.
Por su parte, Cabré compartió videos del debut de Rufina, declarando: “Mi chiruzita por primera vez en 7ma. Orgulloso y muerto de amor, es poco decir”
.
Esta historia de superación y amor paternal es un ejemplo inspirador de cómo el compromiso y la unión pueden prevalecer incluso después de una separación. La China y Nicolás han demostrado que, con madurez y prioridad en el bienestar de su hija, pueden brindarle un apoyo incondicional en cada uno de sus pasos.
El debut de Rufina en el fútbol es solo el comienzo de una carrera llena de promesas. Con padres tan dedicados y orgullosos, no hay duda de que esta joven talento tendrá todo el respaldo y amor que necesita para alcanzar sus sueños.
