Sabrina Rojas ha vuelto a apostar por el amor, esta vez con Gabriel “Lechu” Olivieri, ex Gran Hermano y actual gerente de un hotel de cinco estrellas. En una entrevista sincera con Pamela David en Desayuno Americano (América TV), la actriz habló sin filtros sobre su presente sentimental y reveló el paso que aún no han dado como pareja: la convivencia.
“Falta una convivencia… Eso es lo que no se dio todavía”
, confesó Sabrina, quien se muestra cauta pero radiante en esta nueva etapa. Explicó que “Estoy en un momento hermoso, lo que tengo es algo sano, real. Pero también estoy más cauta. No me desespero por convivir”
.
Encontrando la Madurez en el Amor
Después de los altibajos mediáticos de su anterior relación con Luciano Castro, Sabrina parece haber encontrado la calma y la estabilidad que tanto anhelaba. “Lo que más me gusta de él es que me hace reír, que me cuida. Es muy compañero”
, dijo con entusiasmo sobre su nueva pareja.
Si bien por ahora mantienen rutinas separadas, Sabrina no descarta la posibilidad de compartir techo más adelante, a pesar de que el pasado de Lechu ha sido objeto de escándalos. “No me interesa”
, aclaró la actriz, demostrando su madurez y enfoque en la relación presente.
Reconstruyendo Vínculos
Uno de los aspectos pendientes en la pareja es la presentación de sus hijos. “Todavía nuestros hijos no se conocen”
, reveló Sabrina, quien parece estar tomando las cosas con calma para asegurar una transición suave.
Por otro lado, Sabrina también abordó su relación con su ex, Luciano Castro, con quien mantiene un vínculo cordial por sus hijos en común. “Sí, se conocen. Está todo bien, cada uno rehizo su vida y eso es lo importante”
, dijo, desdramatizando cualquier posible conflicto.
Enfocada en el Presente y el Futuro
Con esta nueva etapa, Sabrina busca dejar atrás los escándalos del pasado y enfocarse en una relación más estable y madura. “Todavía nuestros hijos no se conocen”
, reveló, demostrando que está tomando las cosas con calma para asegurar una transición suave.
Sus seguidores en redes sociales celebran verla feliz nuevamente, disfrutando del amor, de sus hijos y de una vida que, después de muchas idas y vueltas, parece estar más en paz.
