El fútbol es un deporte en constante evolución, donde las tácticas y estrategias se reinventan para superar a los rivales. Una de las más fascinantes transformaciones ha sido la del fuera de juego, que ha pasado de ser una regla defensiva a convertirse en una poderosa arma ofensiva en manos de equipos como el Milan de Sacchi y el actual Barcelona de Flick.
El Milan de Sacchi y la Trampa del Fuera de Juego
En la temporada 1989/90, un joven Hansi Flick, entonces mediocampista del Bayern Munich, quedó impresionado por la forma en que el Milan de Arrigo Sacchi utilizaba el fuera de juego. Sacchi había convertido a su equipo en una máquina de presión, donde los jugadores se movían como un racimo de uvas, dejando a los rivales en posición adelantada, incluso a aquellos que no participaban directamente en la jugada.
«Nosotros dejábamos a los delanteros contrarios dos metros por detrás de nuestra defensa»
, recordaría Sacchi años más tarde. Esta estrategia, conocida como la “trampa del offside”, fue clave para que el Milan ganara dos Copas de Europa y dos Intercontinentales consecutivas, convirtiéndose en el mejor equipo del mundo en ese momento.
La Evolución del Fuera de Juego
Sin embargo, en 1991, la International Football Association Board (IFAB) modificó dos reglas del fuera de juego que estaban vigentes desde 1925. Ahora, un atacante en línea con el penúltimo rival no estaría en posición de fuera de juego, y un atacante sí lo estaría si el pase partía desde el campo propio. Estas cambios, apodados como la “Ley anti Milan”, limitaron la efectividad de la estrategia de Sacchi.
Pero el espíritu del Milan de Sacchi se ha mantenido vivo en el Barcelona de Flick, que también apela a “defender hacia adelante”, como lo sintetizó Rinus Michels, padre del “fútbol total” de la Naranja Mecánica holandesa de los 70. Esta filosofía provoca que los rivales caigan en fuera de juego, un concepto que César Luis Menotti convirtió en su propia “filosofía del achique”.
El Barcelona de Flick y la Obsesión por el Fuera de Juego
El Barcelona de Flick es el equipo que más provoca fuera de juego en promedio por partido (7) entre los de las cinco ligas top de Europa, una “anomalía estadística” según Opta Analyst. Esta temporada 2024/25 de LaLiga es la primera con el fuera de juego semiautomático del VAR, lo que limita el margen de errores.
Para Flick, la idea es “presionar al máximo y también presionar hacia la pelota”, creando una unidad compacta que no deje espacios entre líneas. Esta filosofía, que bebe del legado de Sacchi, se entrelaza con la presión ofensiva y la voracidad goleadora del Barcelona, que ha marcado 91 goles en LaLiga, siendo el segundo equipo con mayor cantidad en las cinco ligas top europeas.
Sin embargo, como advierte Menotti, “lo que sorprende hoy no sorprende mañana”. El riesgo de esta estrategia es que los rivales puedan “agarrarle la mano” al equipo y volverlo vulnerable, algo que el Barcelona de Flick deberá evitar si quiere mantener su hegemonía en el fútbol moderno.