El desafío de las fiestas de Navidad y Año Nuevo para las familias ensambladas
El escenario festivo que supone una atmósfera de paz y esperanza puede estar plagado de conflictos, sumando estrés al cierre de año. Muy especialmente dentro de las familias ensambladas, donde puede aparecer la tirantez de los vínculos como la gran convidada de piedra entre los hijos de uno y las ex parejas del otro. “Los míos, los tuyos y los nuestros”… nunca mejor dicho. Les pasa a famosos como Pampita, Nicole Neumann y Marcelo Tinelli que el año pasado compartió la Navidad con Soledad Aquino, su ex. Pero les pasa a muchos en cada rincón del país.
Ante este desafío, Manuel Colombo, Coach Ontológico y especialista en Mirada Sistémica, enseña cómo se puede generar mayor bienestar en medio de estas complejidades que representan el tópico de estos días. “En ocasiones, la presión social nos impulsa a cumplir con el mandato de pasar las Fiestas en familia, pero corresponde preguntarse si, realmente, estamos eligiendo libremente”, señala a Revista GENTE.
La importancia de la comunicación en las familias ensambladas
La fidelidad a las tradiciones no siempre se traduce en bienestar emocional, comenta Colombo. Ante esto, detalla que explorar alternativas es esencial y considera que “en las familias ensambladas, la clave está en la comunicación”. Conversar con todas las partes involucradas, acordar y comprender que las elecciones de los hijos no implican menos amor por el otro progenitor. Integrar a los hijos ensamblados requiere atención: facilitar, pero sin imponer deseos. El diálogo y la escucha se convierten en herramientas fundamentales para construir relaciones armoniosas, amplía.
Según Colombo, “es crucial reconocer que, a pesar de la complejidad, el adulto es quien decide. Mantener el equilibrio en el orden familiar implica que quien ocupa el rol de padre tome decisiones conscientes. Muchas veces, por ejemplo, he visto personas con resistencia a formar nuevas parejas por el bien de los hijos, y esto puede generar desorden en el sistema”.
La importancia de las conversaciones adultas
La conclusión es clara: la importancia de mantener conversaciones adultas, cultivando la empatía, la claridad y evitando tomar nada de manera personal. “Estas fiestas son una oportunidad para que los adultos de la familia regalen la magia de una buena conversación trayendo comprensión y aceptación, para generar un mayor bienestar y evolucionar en su nivel de consciencia”, concluye.