La China Suárez defiende a su hija de los comentarios negativos
Las primeras fotos de Nicolás Cabré junto a su novia, Rocío Pardo, y su hija, Rufina, fruto de su relación con la China Suárez, llenaron de ternura las redes sociales del actor. Sin embargo, no todos los comentarios fueron positivos.
Una seguidora llamada Valeria lanzó un comentario despectivo sobre la crianza de la hija de Cabré y Suárez. Ante esto, la actriz argentina no se quedó callada y respondió de manera contundente.
“Preocupate por la cabeza de tus hijos”, dijo la China Suárez en respuesta al comentario negativo.
La actriz también agregó: “Por la de nuestra hija nos ocupamos nosotros. Y bien criada y feliz está”.
El apoyo de los seguidores
Las palabras de la China Suárez sorprendieron a muchos seguidores de Nicolás Cabré, quienes expresaron su apoyo a la pareja y su admiración por la forma en que están criando a su hija.
Algunos seguidores señalaron que aquellos que critican la crianza de la niña son los mismos que siguen en relaciones tóxicas. Otros destacaron la importancia de que los padres sean felices y no se mantengan juntos solo por el bienestar de los hijos.
En medio de la polémica, la periodista Pochi de Gossipeame compartió el mensaje de la China Suárez en sus redes sociales y preguntó a sus seguidores qué opinaban al respecto.
Rocío Pardo habla sobre su relación con Nicolás Cabré
En medio de esta controversia, Rocío Pardo, la novia de Nicolás Cabré, también ha hablado sobre su relación y su visión de la maternidad.
La actriz y bailarina cordobesa confesó que, por el momento, no siente el deseo de ser madre. Sin embargo, no descarta la posibilidad de cambiar de opinión en el futuro.
“Quizás no me pase nunca y transite la vida compartiendo con la hija de mi pareja o con mis hermanos más chicos, o tal vez en unos años cambio de opinión”, dijo Pardo en una entrevista.
Conclusión
La China Suárez no dudó en defender a su hija de los comentarios negativos en una foto de Nicolás Cabré. Su respuesta contundente y el apoyo de sus seguidores demuestran la importancia de proteger la intimidad y la felicidad de los hijos.
