Sofía Gala, la hija de la icónica Moria Casán, ha sorprendido al mundo del espectáculo con una revelación fascinante sobre su vida privada. Durante su participación en el programa “La Noche Perfecta”, Gala confesó abiertamente su particular pasión por los cementerios, declarando: “Amo los cementerios, me siento muy bien en los cementerios“. Lejos de ser una afición común, esta conexión única con los lugares de descanso eterno ha brindado a Sofía una fuente de paz y experiencias extraordinarias.
Según relata Gala, su amor por los cementerios la ha llevado a visitar estos espacios en cada lugar que visita. “Yo llevo a mis hijos tipo plaza. ¡Es hermoso!“, afirma, dejando entrever la profundidad de su vínculo con estos sitios. Incluso, durante un viaje a Jujuy, Sofía tuvo una experiencia paranormal que la dejó sorprendida: “Creo que vi un fantasma“, reveló, generando aún más expectativa en torno a su fascinante pasión.
Pero la historia no termina ahí. Gala también compartió una anécdota aún más sorprendente, en la que se encontró con un desconocido en uno de los cementerios que visitaba. “De golpe, en otra tumba había un chabón que se me acerca y me pide un pucho en un lenguaje que yo ya no entendía“, relató, dejando a todos los presentes sin palabras. Según Sofía, este encuentro inesperado con un hombre de acento indescifrable le brindó una experiencia única y memorable.
Más allá de estas vivencias, la hija de Moria Casán también reveló que su infancia estuvo marcada por una iglesia evangélica que se instaló en la casa de su madre. “Fue lo más loco que me pasó en la vida. Venir por esa calle que te lleva a la casa de mamá y ver carteles. Casi me muero“, confesó, demostrando cómo su vida como hija de una celebridad la ha moldeado de maneras inesperadas.
En resumen, la fascinación de Sofía Gala por los cementerios y su conexión con el mundo espiritual y paranormal revelan una faceta única y sorprendente de la hija de la reconocida Moria Casán. Su valentía al compartir estas experiencias personales nos invita a reflexionar sobre la riqueza y diversidad de las vidas de aquellos que crecen en el mundo del espectáculo.