Un escándalo sin precedentes se desató recientemente cuando Julieta Castro y Anita Espósito, hermana de la cantante Lali Espósito, protagonizaron un momento polémico en un programa de streaming al incitar a la violencia contra el político Javier Milei.
Todo comenzó cuando Julieta, la hija de la influencer y bailarina, lanzó una declaración bastante polémica durante el programa: Yo te voy a defender lo indefendible. Vos poder matar al presidente que yo te voy a defender
. Ante esto, Anita no dudó en responder de manera pícara: ¿Vos querés matar al presidente? Andá yendo que yo te banco. ¿Querés una bolsa negra?
.
Este comentario de la hermana de Lali Espósito desató un gran escándalo por la gravedad de la incitación a la violencia que realizaron en vivo. Uno de los compañeros presentes en el streaming no dudó en encarar a Castro y consultarle por qué había tocado un tema tan sensible: ¿Justo ahí te tenías que meter?
. La joven confesó que no quería generar una polémica, pero que lo hizo sin intención.
Reacciones en las Redes Sociales
Por supuesto, en las redes sociales no cayó nada bien los comentarios de Julieta y Anita, y fueron ampliamente criticados por los usuarios. Algunos de los comentarios más destacados fueron:
Se creen vivas y superadas, ya son cualquier cosa los streaming
Después salen a pedir perdón. Basta de estas personas en el aire que ni estudios tienen para trabajar de eso
Con esto los pueden denunciar tranquilamente, y ojalá lo hagan
No es polémico, es un delito. Incitación a la violencia
Estos comentarios reflejan la indignación de la audiencia ante las declaraciones de Julieta y Anita, quienes parecen haber actuado de manera irresponsable y sin considerar las consecuencias de sus palabras.
Conclusión
Este escándalo ha puesto en evidencia la necesidad de que los influencers y personalidades públicas sean más cuidadosos con sus declaraciones, especialmente cuando se trata de temas tan sensibles como la incitación a la violencia. Es importante que estos líderes de opinión asuman su responsabilidad y se abstengan de promover acciones que puedan poner en riesgo la seguridad de otros. Solo así podremos construir una sociedad más justa y pacífica.
