En medio del escándalo entre la modelo Luciana Salazar y el economista Martín Redrado, se han revelado los detalles de la cuota que él le pasaba a Salazar por la manutención de su hija Matilda. Según lo informado por Yanina Latorre, Redrado le entregaba a Salazar 10 mil dólares mensuales para el cuidado de la niña.
Cabe recordar que Redrado no es el padre biológico de Matilda, pero firmó un acuerdo hace años en el que se comprometía a hacerse cargo económicamente de ella hasta que cumpliera los 18 años. Sin embargo, una vez que se separó de Luciana, dejó de cumplir con ese compromiso, lo que ha desencadenado una batalla legal entre ambos.
Luciana Salazar ha reclamado en reiteradas ocasiones que Redrado le debe el pago de esa cuota, así como también una suma de 200 mil dólares que supuestamente le adeuda. La modelo sostiene que el vínculo entre Redrado y Matilda debía mantenerse hasta el 2021, pero el economista ha cambiado su discurso, alegando que la obligación finalizó en 2018.
La Violencia de Negar a la Hija
Salazar ha sido enfática en señalar que la negativa de Redrado a cumplir con su compromiso económico hacia Matilda es una forma de violencia. Hay muchas formas de ser violento, más allá de lo físico. Negar a la nena también es violencia
, ha expresado la modelo.
Según Salazar, Matilda está consciente de que Redrado no está cumpliendo con lo que le había prometido, lo que le genera un gran impacto emocional. Matilda sabe que Martín no está cumpliendo con lo que le había prometido. Cuando le pregunto a Matilda por Martín, ella dice: ‘iba a tener un papá’. Me duele que una criatura lo tome de esa forma
, lamentó la modelo.
La Batalla Legal Continúa
Luciana Salazar ha iniciado una guerra en los medios y en la justicia para exigir que Redrado cumpla con su responsabilidad económica hacia Matilda. La modelo busca que se le paguen los montos adeudados y que se mantenga el apoyo financiero hasta que su hija alcance la mayoría de edad.
Esta disputa legal entre Salazar y Redrado ha generado gran interés y debate público, poniendo en evidencia la importancia de garantizar el bienestar y el apoyo económico de los hijos, independientemente de la relación entre los padres.
