Papucho, el último eliminado de Gran Hermano (Telefe), abre su corazón y comparte su fascinante historia. Desde sus creencias terraplanistas hasta su profunda conexión con lo sobrenatural, este participante ha recorrido un viaje espiritual que lo ha transformado.
Dos Etapas en la Casa más Famosa
Papucho estuvo dentro de la casa de Gran Hermano por un total de tres meses y pico, con una breve salida por una complicación de apendicitis. Durante su primera estadía, la ausencia de sus hijos fue particularmente difícil, pero el ingreso de ellos al “congelados” le dio un nuevo impulso. Cuando tuvo que salir, la duda y la incertidumbre lo invadieron, pero el reencuentro con su familia y el cariño del público lo llenaron de energía positiva.
Una Vida Antes del Reality
Antes de Gran Hermano, Papucho ya era una figura conocida en las redes sociales, donde compartía contenido con un mensaje positivo y humorístico. Junto a su primo, estuvo a punto de incursionar en el teatro, demostrando su pasión por la actuación desde temprana edad. Además, Papucho se desempeñaba en el mundo textil, teniendo una marca de ropa con su exesposa durante casi 17 años.
La Entrañable Relación con su Expareja
Uno de los aspectos más sorprendentes de Papucho es su estrecha amistad con la madre de sus hijos, con quien mantiene una relación ejemplar. Ella lo apoyó incondicionalmente en su participación en Gran Hermano, incluso encargándose de los niños durante su ausencia. Papucho cree firmemente que, si hubo amor, la separación no tiene por qué romper los lazos, y así lo ha demostrado con su expareja.
Creencias Únicas y Experiencias Sobrenaturales
Papucho se ha abierto sobre sus creencias, entre las que se encuentran el terraplanismo y la ley de la atracción. Aunque no impone sus ideas, no teme hablar de ellas y las defiende con convicción. Además, ha tenido experiencias sobrenaturales, como avistamientos de OVNIS, que lo han marcado profundamente.
“Yo el OVNI lo vi cuando tenía 12 años. Me pasó una nave arriba de un árbol. Fue cerca. Por suerte yo estaba con un amigo y su papá.”
Papucho también practica el reiki y se considera una persona “mística” y “voladora”, características que han influido en su forma de ver el mundo y de manifestar sus deseos.
Mirando hacia el Futuro
Ahora que ha salido de Gran Hermano, Papucho se encuentra abierto a las oportunidades que se le presenten, sin forzar nada. Confía en la ley de la atracción y en que todo lo que ha manifestado en su vida, como sus hijos y su trabajo, se hará realidad. Su sueño es poder dedicarse a la actuación y seguir compartiendo su mensaje positivo con el mundo.
La experiencia de Papucho en Gran Hermano y su viaje espiritual personal lo han convertido en una figura única y fascinante, que no teme mostrarse tal cual es, abrazando sus creencias y su conexión con lo sobrenatural.
