La increíble anécdota de Mariano Peluffo
Mariano Peluffo es uno de los conductores más populares y queridos de la televisión, que supo estar frente a tanques como MasterChef y Gran Hermano. En las últimas horas, recordó una terrible anécdota que lo dejó internado por una semana entera, cuando era apenas un niño.
Un encuentro en el programa radial Sarasa
Fue en el programa radial Sarasa, transmitido por La 100 FM y conducido por Julieta Prandi, donde comenzaron leyendo un hilo de Twitter sobre malas experiencias consumiendo bebidas de manera equivocada. Por este motivo, el también locutor, se animó a contar la increíble situación que tuvo que atravesar durante un encuentro familiar.
La insólita internación de Mariano Peluffo
Comenzó relatando: ‘A mí me pasó de chiquito también, pero chiquito chiquito, debía tener dos años o dos años recién cumplidos’. Sembrando la intriga en los panelistas, Santiago Calzarotto, integrante del programa, le preguntó intrigado: ‘¿Qué cosa?’. Allí, Peluffo expresó: ‘Mi mamá estaba embarazada de mi hermana Leandro, es decir que yo tenía dos años’.
Luego, detalló qué fue lo que tomó en aquel entonces, y sorprendió a todo el programa. ‘Anilina para teñir cueros. Mi mamá fue a la casa de una tía, la tía Cristina, y uno de los primos de mi mamá, que estaba con una onda muy Hippie, hacía carteras y cinturones y les metía tintura’, aclaró. Luego, añadió: ‘Estaba en una botella de gaseosa la tintura y al lado un vaso servido donde mojaba el pincel. Yo, dos años, me acerco, agarro el vaso y hago tuki y lo empino pensando que era gaseosa’. Y remarcó: ‘Fondo blanco y aparte entró todo, tintura con alcohol’.
La internación y el desenlace
Respecto a cómo se enteraron sus padres de lo que había tomado, relató: ‘Me di vuelta y la fui a ver a mi mamá con la boca que me salía como si me hubiera comido mil moras. Y ya medio boleado porque eso tenía alcohol de quemar. No, no… un desastre’. Para finalizar con su terrible anécdota, sentenció: ‘Hospital de niños y este ser estuvo una semana internado en el hospital de niños’.
Otra anécdota desopilante
Por último, recordó que no fue el único al que le pasó algo parecido, ya que también tuvo que vivirlo con sus abuelos. ‘Mi abuelo y mi abuela se llevaron a Córdoba el edulcorante en un frasquito chiquitito, y cuando lo pusieron al mate dijeron ‘che, esto no endulza’. Le metía, le metía, le metía y no endulzaba. Y se tomaron todo el termo de mate con todo el frasquito de edulcorante’, contó. ‘Después a la noche llegaron al hotel, mi abuelo se fue a bañar, y agarró el frasquito donde tenía el líquido para los hongos de los pies y era edulcorante. O sea que se tomaron un termo de mate con antimicóticos’, concluyó Mariano Peluffo.
