La indignación y la lucha de L-Gante: ¿Por qué sigue detenido?
Se van a cumplir dos meses desde que L-Gante se encuentra detenido. Si bien en las últimas semanas hubo un poco de esperanza respecto a la prisión domiciliaria con monitoreo de una tobillera electrónica, en el día de ayer la Cámara de Apelaciones de Mercedes revocó esta alternativa que había resuelto el juez. Según insisten, aún hay ‘peligros procesales’, y creen que el cantante podría entorpecer la investigación de la causa, incluso permaneciendo detenido en su casa.
El cumbiero se vio involucrado en una causa por amenazas, privación ilegítima de la libertad y tenencia de droga. La indignación en el Barrio Bicentenario y de los fanáticos es total: señalan en redes sociales que se trata de una persecución injusta más hacia un pibe de barrio. Y que otras personas, en situaciones más graves, pero más acomodadas, lograron recuperar su libertad con más facilidad.
El papá de L-Gante: ‘Estamos combatiendo a Satanás con la biblia’
Si bien L-Gante no tuvo una infancia con un padre presente, algunos años más tarde y luego de saltar a la fama, el cantante de música urbana logró recomponer su vínculo con Miguel Ángel Prosi. Actualmente, el joven se encuentra detenido por una denuncia de privación ilegítima de la libertad, y su padre salió a hablar al respecto para aclarar algunas dudas de la prensa. ‘Estamos luchando contra un abogado que tiene una maldad manifiesta, tira piedras y sigue tirando. Y nosotros vamos con un letrado que es de lo mejorcito, pero va con la Biblia. Estamos combatiendo a Satanás con la Biblia’, señaló Miguel en A la tarde (América). Al mismo tiempo, destacó que todos están conformes con el desempeño del abogado, menos él. ‘Quiero ir más con los tapones de punta. Pero yo soy de esa idea. Soy el único que disiento con eso, el resto está conforme’, indicó.
Cuál es la situación procesal de L-Gante
Además de su libertad, al cantante también se le negó el cambio de carátula planteado por la defensa. Su abogado, Pablo Merlo, fundamenta para su pedido que ‘no se encuentran acreditados los requisitos de los delitos de privación, amenazas y tenencia de estupefacientes’, y pidió que sólo se lo impute por amenazas simples. También dijo: ‘Lo veo pensando de otra manera. Me dijo que está considerando estudiar abogacía cuando salga. Está más tranquilo. Creo que este tiempo en soledad le ha servido para reflexionar sobre muchas cosas’. El altercado que originó el conflicto se dio en un boliche del barrio Bicentenario, entre los amigos del cumbiero y dos empleados municipales. Según la denuncia, habrían estado 23 minutos cautivos.