Un lugar hermoso pero doloroso
Hace algunos meses, Benjamín Vicuña publicó su libro ‘Blanca, la niña que quería volar’ movido por el duelo que tuvo que atravesar tras el fallecimiento de su hija mayor, Blanca. En el aniversario de su partida, el actor chileno compartió emotivas palabras y homenajes desde el último sitio donde vacacionaron juntos, un lugar hermoso pero doloroso.
Como todos los días 8 del mes, Vicuña posteó en sus redes sociales unas palabras en conmemoración de la pequeña, acompañado de un ramo de rosas blancas. En su relato más que emotivo, expresó: ‘En un momento con el doctor, le dije: ¿Sabes? En México fueron las vacaciones más lindas de mi vida y las últimas para mi hija, Blanca, que al llegar a Chile murió a la semana. Entendí que mi garganta explotaba por eso, que mi cabeza volaba entre escenas pasadas y acento neutro, que el paisaje me llevaba como un vehículo a un lugar hermoso pero doloroso’.
El actor chileno emocionó a todos sus seguidores al compartir su experiencia y reflexionar sobre la complejidad del corazón, los recuerdos y la vida misma. En honor a Blanca, Vicuña llevó flores blancas y creó un altar en su memoria, donde también se encuentran algunos de sus discos preferidos y una fotografía en blanco y negro de ella.
Además, el hijo mayor de Vicuña y Pampita, Bautista, también recordó a su hermana mayor en este día tan especial. A través de un collage de fotos, el adolescente expresó su amor y añoranza por Blanca.
El recuerdo de Blanca sigue vivo en la familia Vicuña y en los corazones de todos aquellos que siguen la historia de Benjamín y su hija. Cada aniversario de su partida es una oportunidad para honrar su memoria y recordar el amor que los unió.