El increíble significado detrás del número con el que Manzana ganó la moto en Gran Hermano
Todo es felicidad para Manzana, porque acaba de ganar la moto de lujo por la que compitió con sus compañeros ‘originales’ de Gran Hermano. Gracias al azar y a una epifanía que tuvo antes de elegir su llave, la 138, Federico ‘Manzana’ Farías se volverá a Tucumán en dos ruedas.
Luego de sus emocionados festejos, el jugador contó por qué agarró esa llave con ese número en particular, la única que podía poner en marcha el vehículo millonario, cuyo valor ronda los 7 millones 500 mil pesos a mediados de marzo. ‘Iba a buscar el 42, lo ví, pero después busqué el 138 porque me acordaba de un amigo, Luis Vázquez, jugador de Boca, que tiene el 38 en la camiseta…’, explicó Manzana luego de consagrarse ganador, ya más tranquilo, luego de mandarle saludos a la mamá.
El hermano de Furia admite que está todo arreglado en Gran Hermano
Entre las felicitaciones de los hermanitos, Manzana remató su explicación con un guiño para Catalina, que en los primeros días del reality dijo ser ‘muy botinera’. ‘¡Te lo puedo presentar, Cata!’, le propuso Farías, divertido, mientras todos estallaban de risa.
En días anteriores, Manzana se descargó contra un grupito específico dentro del reality, Los Bro, conformado por Martín ‘Chino’ Ku, Bautista Mascia y Nicolás Grosman. El tucumano se mostró indignado ante Furia y Catalina y opinó que los chicos tenían ‘acomodo’ con la producción. ‘Siento que se ha ido Lisandro y a estos culead… le han metido a dos jugadores para ellos’, dijo Farías, cuando a la casa reaparecieron dos participantes que de inmediato fueron eliminadas. ‘Una es Sabrina, que ni siquiera tendría que haber entrado, y, la otra, la culead… de Denisse’, señaló el joven, con bronca.
Conclusión
La historia detrás del número con el que Manzana ganó la moto en Gran Hermano es realmente sorprendente. Su elección del número 138, en lugar del 42, se basó en su amistad con el jugador de fútbol Luis Vázquez, quien lleva el número 38 en la camiseta de Boca. Este detalle muestra cómo los pequeños momentos y las conexiones personales pueden tener un impacto significativo en nuestras vidas. Además, Manzana también compartió su descontento con ciertos participantes del reality, lo que añade un poco de drama a la historia. En definitiva, la victoria de Manzana en Gran Hermano no solo representa un premio material, sino también un símbolo de amistad y lealtad.