Pampita, la reconocida modelo y presentadora argentina, ha dado un paso más en su vida personal al oficializar su romance con el polista Martín Pepa. Esta noticia ha generado gran interés en el mundo del espectáculo, y María Vázquez, esposa del legendario polista Adolfo Cambiaso, ha compartido su perspectiva sobre la incursión de Pampita en este exclusivo deporte.
Cuando se le preguntó si había visto a Pampita, Vázquez fue directa al responder: No, la verdad que no. A pesar de algunos cruces en el pasado, la esposa de Cambiaso respondió con amabilidad, dejando claro que el mundo del polo se maneja de manera diferente al del espectáculo.
Códigos y Dinámicas Exclusivas del Polo
Vázquez explicó que el polo se rige por códigos totalmente distintos a otros deportes. Cada esposa de polista tiene sus propios grupos y, a menudo, no se ven con frecuencia. Esto se debe a que los maridos de estas mujeres juegan juntos en un equipo y al día siguiente pueden estar compitiendo en equipos contrarios. A diferencia del fútbol, donde los equipos se mantienen estables durante toda la temporada, en el polo la dinámica es mucho más fluida y cambiante.
Además, Vázquez destacó que la vida de los polistas es muy diferente a la de los futbolistas. En el polo, los jugadores pasan mucho tiempo en las caballerizas y en entrenamientos, lo que implica un estilo de vida más alejado de los focos del espectáculo.
Adaptándose a un Mundo Exclusivo
Para Vázquez, el polo es un mundo cálido y estable, pero que inicialmente le costó adaptarse, ya que ella no era del palo. Sin embargo, con el tiempo, logró acostumbrarse a este estilo de vida más enfocado en los caballos y los entrenamientos.
En cuanto a la posible percepción de prejuicio hacia el mundo del polo, Vázquez considera que, más que prejuicio, existe mucha curiosidad. Ella explica que, al tratarse de un medio relativamente pequeño, todo lo que es diferente suele llamar la atención.
El Desafío de Pampita en el Polo
La incursión de Pampita en el mundo del polo representa un desafío tanto para ella como para el círculo de esposas de polistas. Deberá adaptarse a códigos y dinámicas exclusivas, alejadas del glamour y la exposición mediática a la que está acostumbrada. Sin embargo, con la guía y el apoyo de Vázquez y otras mujeres del ambiente, Pampita tiene la oportunidad de descubrir y disfrutar de este fascinante deporte de élite.