Felipe Fort, el hijo del fallecido empresario Ricardo Fort, ha compartido algunas de las lecciones que aprendió al observar de cerca cómo su padre fue víctima de personas que se aprovecharon de su bondad y generosidad. A sus 20 años, Felipe se ha enfocado en construir su propia carrera empresarial y ha logrado evitar caer en los mismos errores que cometió su padre.
Según relata Felipe, Crecí viendo cómo a mi papá le sacaban pedazos de a poco. Yo sabía que no quería eso para mí ni para la gente que me rodeara
. Uno de los ejemplos que menciona es que en las obras de teatro de Ricardo Fort, este no lograba obtener ganancias, ya que la gente que se decía amiga de mi papá, se acercaba para sacarle guita
.
Aprendiendo de los Errores de su Padre
A pesar de entender que los sueños de su padre eran genuinos, Felipe reconoce que Ricardo tenía pérdidas cuando en realidad podía tener ganancias, solamente que se juntaba con gente que no hacía las cosas bien con él
. Esta experiencia le ha enseñado a Felipe a ser más cauteloso con sus amistades y a disfrutar de su dinero sin permitir que otros se aprovechen.
Uno tiene que disfrutar el dinero con sus amigos pero sin dejar aprovecharse por el resto
, afirma Felipe. De hecho, cuenta que a veces invita a sus amigos a viajar, pero ellos mismos le dicen: No, no quiero porque siento que me estoy aprovechando y no me gusta
. Ante esto, Felipe les responde que eso le hace bien a él y que no hay problema.
Construyendo su Propio Camino
Ahora, con 20 años y enfocado en su carrera empresarial, Felipe Fort ha aprendido a priorizar el aumento de sus ganancias en lugar de reducir sus gastos. La verdad es que desde que pude trabajar, me concentré más en aumentar las ganancias que en reducir los gastos
, comenta.
Esta experiencia le ha permitido a Felipe desarrollar una perspectiva más prudente y estratégica en sus negocios, evitando caer en los mismos problemas que enfrentó su padre. Al mismo tiempo, ha logrado disfrutar de sus amistades sin ser explotado, aplicando las lecciones que aprendió al observar de cerca los errores de Ricardo Fort.
