La eliminación temprana de Boca Juniors en la Copa Libertadores ha desatado una verdadera tormenta en el seno del club. Tras la derrota ante Alianza Lima, los ánimos se han caldeado y los fanáticos exigen respuestas. Sin embargo, en medio de este clima convulsionado, dos figuras del plantel xeneize han sido protagonistas de un escándalo que ha encendido aún más los ánimos.
Marcos Rojo y Cristian Lema, defensores del equipo, fueron captados en un boliche porteño la noche del lunes feriado, apenas un día después de la dolorosa eliminación. Las imágenes y videos que se viralizaron en redes sociales muestran a los jugadores disfrutando de la noche en un VIP, lejos de las óptimas condiciones en las que deberían presentarse al entrenamiento matutino del martes.
Este comportamiento ha generado una enorme indignación entre los hinchas, quienes no dudan en calificar a Rojo como “un asco de jugador” por salir a divertirse en un momento tan delicado para el club. Además, la situación ha puesto en tela de juicio la profesionalidad de ambos futbolistas, quienes deberían estar enfocados en recuperarse de la derrota y prepararse para los próximos desafíos.
Pero el escándalo no se limita solo a los jugadores. La dirigencia de Boca también ha sido blanco de críticas, pues se cuestiona la gestión que ha llevado a la eliminación temprana en la Libertadores. Incluso, se ha especulado con la posibilidad de que el entrenador, Fernando Gago, pueda ser despedido como consecuencia de este fracaso.
En medio de este clima convulsionado, la afición boquense espera respuestas y soluciones. Mientras tanto, la imagen de Rojo y Lema disfrutando en un boliche ha sido un duro golpe para los fanáticos, quienes exigen mayor compromiso y profesionalismo de sus jugadores.
La reacción de la dirigencia y el futuro de Gago
Más allá del escándalo protagonizado por Rojo y Lema, la eliminación de Boca en la Libertadores ha puesto en jaque la continuidad de Fernando Gago como entrenador del equipo. Según trascendió, el ídolo del club, Juan Román Riquelme, habría sentenciado el futuro de Gago, confirmando que su salida es una “decisión tomada”.
Esta noticia anticipa un final complicado para el ex volante, quien no ha logrado cumplir con las expectativas de la hinchada. La presión de los fanáticos y la dirigencia será determinante en las próximas horas, y Gago deberá demostrar que puede revertir esta situación y llevar a Boca a mejores resultados.
En resumen, el escándalo protagonizado por Rojo y Lema, sumado a la eliminación temprana en la Libertadores, ha desatado una verdadera tormenta en Boca Juniors. Los fanáticos exigen respuestas y soluciones, mientras que la dirigencia se encuentra en una encrucijada sobre el futuro del entrenador. Sin duda, este episodio marcará un antes y un después en la historia reciente del club.