Natalie Pérez y Marcela Kloosterboer son dos figuras destacadas del mundo del espectáculo argentino, conocidas por su talento y carisma. Sin embargo, lo que pocos sabían es que en un momento de sus carreras, estas dos actrices no se llevaban bien y hasta se “odiaban”, como ellas mismas lo han revelado.
En una reciente entrevista en el programa de streaming de Kloosterboer, Bondi, ambas actrices sorprendieron a sus seguidores al sincerarse sobre los inicios de su relación. Lejos de la complicidad que las une hoy en día, Natalie y Marcela confesaron que cuando se conocieron por primera vez en el set de Chiquititas, no hubo una buena conexión de inmediato.
De la Rivalidad a la Amistad
Según recordaron, en aquel entonces Natalie era una de “las adultas” del elenco, mientras que Marcela era una de las jóvenes protagonistas. Esta diferencia de estatus generó cierta tensión entre ellas, al punto que Kloosterboer admitió que “no la quería” en un principio.
“No, habíamos trabajado en Chiquititas, pero ella no me quería porque era de las adultas”
, reveló Natalie, mientras que Marcela agregó: “Nos decíamos ‘che, el bigote. No te afeitaste el bigote otra vez Carla. Nos reíamos todo el tiempo en escena y las dos nos reíamos de nosotras mismas”
.
Sin embargo, con el paso del tiempo, las diferencias se fueron limando y lograron construir una gran amistad. Hoy en día, Natalie y Marcela se muestran muy unidas y disfrutan de compartir anécdotas y momentos divertidos con sus seguidores.
Aprendiendo a Reírse de Uno Mismo
Según Natalie, el secreto para superar esa rivalidad inicial fue aprender a no tomarse las cosas tan en serio y a “descontracturarse” un poco. “Es un humor que para mí está buenísimo y que hay que empezar a adoptarlo para toda la vida porque si no te lo tomás muy enserio, muy literal y un poco hay que descontracturar y joder”
, explicó la cantante.
Esta actitud de no tomarse a sí mismas demasiado en serio les permitió a ambas actrices reírse de sus propios errores y diferencias, lo que sin duda contribuyó a fortalecer su vínculo a lo largo de los años.
Un Reencuentro Lleno de Risas
Incluso, Natalie recordó una divertida anécdota sobre su primer encuentro con Marcela, en la que reveló que la consideraba “la más linda del país, del mundo mundial”, pero que llegó tarde a las grabaciones, lo que le generó una mala primera impresión.
Ante esta revelación, Marcela reaccionó con sorpresa y entre risas, admitiendo que “es verdad, así empezamos”, dejando en claro que, aunque su inicio no fue el mejor, lograron construir una gran relación a lo largo del tiempo.
La historia de Natalie Pérez y Marcela Kloosterboer es un claro ejemplo de cómo la madurez, el humor y la disposición a crecer pueden transformar una relación conflictiva en una hermosa amistad. Una lección valiosa sobre la importancia de no juzgar a los demás y de aprender a reírse de uno mismo.
