La triste partida de María Seoane
La periodista y escritora María Seoane falleció esta mañana a los 75 años, dejando un vacío en el periodismo de investigación argentino. Su trayectoria de más de cuatro décadas marcó un antes y un después en el ámbito de la comunicación y la cultura.
María Seoane se destacó por su labor como directora de Radio Nacional entre 2009 y 2015, así como por su participación en periódicos de alcance nacional y su autoría de una docena de libros de historia argentina. Además, fue una destacada militante de los derechos humanos, investigando para la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Un legado en el periodismo y la cultura
María Seoane no solo se destacó en el ámbito periodístico, sino que también fue una multifacética profesional. Además de periodista y escritora, se recibió de economista en la UBA y fue docente de la cátedra de Investigación Periodística en diferentes universidades.
Sus libros, como ‘La noche de los lápices’ y ‘El burgués maldito’, trascendieron las páginas y fueron llevados al cine, convirtiéndose en piezas fundamentales de la historia argentina. A lo largo de su carrera, recibió numerosos premios y reconocimientos, como el Premio Konex, el Premio Internacional de Prensa Rey de España y el Premio Rodolfo Walsh, entre otros.
Reacciones ante su partida
La noticia de la muerte de María Seoane conmocionó a figuras destacadas de la política y la cultura argentina. Cristina Kirchner, expresidenta de Argentina, expresó su tristeza y destacó la labor de la periodista como una gran profesional comprometida. Carlos Rottemberg, reconocido en el ámbito teatral, recordó a María Seoane como una importante personalidad de la cultura argentina.
La Asociación Argentina de Actores también se despidió de María Seoane, resaltando su compromiso con la cultura y los derechos laborales. Otras figuras como Vilma Ibarra, Bernarda Llorente y Marcela Feudale también expresaron su tristeza por la partida de la periodista y escritora.
Un adiós a una luchadora imprescindible
María Seoane deja un legado imborrable en el periodismo argentino y en la cultura del país. Su compromiso con la verdad, los derechos humanos y la investigación la convirtieron en una luchadora imprescindible. Su partida deja un vacío en el ámbito periodístico y en el corazón de quienes la conocieron y admiraron su trabajo.