Cristina Kirchner lanzó un desafío al Gobierno al exigir la desregulación del mercado de medicamentos y la importación de genéricos más baratos. Esta provocación le dio munición a Federico Sturzenegger, el ministro de Desregulación, quien ha estado batallando con empresarios del sector de la salud que tienen gran influencia en el Ejecutivo.
El reclamo de Cristina se alinea con el pedido del gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, de habilitar la importación de genéricos económicos en su provincia. Esto forma parte de un debate más amplio sobre los altos precios de los medicamentos en Argentina y su impacto en los costos del sistema de salud.
La Industria Farmacéutica en la Mira
Sturzenegger ha puesto a la industria farmacéutica en su punto de mira, señalando repetidamente que los medicamentos son mucho más caros en Argentina que en el exterior. Recientemente, impulsó una norma para comercializar analgésicos y antiácidos en kioscos, con el objetivo de reducir los precios.
Además, el DNU 70 que Sturzenegger impulsó, obligaba a los médicos a recetar únicamente por el nombre genérico de la droga, sin mencionar la marca. Esto buscaba limitar el poder de los laboratorios, que despliegan una amplia red de visitadores médicos para persuadir a los especialistas a recetar sus marcas.
Sin embargo, la reglamentación del Ministerio de Salud atenuó en gran medida esta medida, luego de un eficaz lobby de las cámaras farmacéuticas. Aun así, Sturzenegger confía en que la próxima entrada en vigor de la receta electrónica obligatoria permitirá un mayor control y transparencia en las prescripciones, lo que podría incidir en los precios.
Los Datos que Preocupan a Cristina
Según un informe del CEPA, centro de estudios cercano a Cristina Kirchner, los precios de los medicamentos han aumentado 211,5% en los últimos 12 meses, superando en 18,5 puntos al Índice de Precios al Consumidor. Además, el costo de los seguros de salud (que dependen en gran medida de los precios de los fármacos) subió 271,9% en el mismo período.
El reporte también señala que los medicamentos más consumidos por los adultos mayores aumentaron aún más que el promedio. Esto ha generado preocupación en Cristina, quien recientemente se reunió con el embajador de India, Dinesh Bhatia, ya que ese país es líder mundial en la producción de medicamentos genéricos de bajo costo.
La Estrategia del Gobierno
Sturzenegger y el secretario de Comercio e Industria, Pablo Lavigne, comparten el objetivo de acelerar la importación de medicamentos que cuenten con la aprobación de agencias regulatorias de países con altos estándares, como la FDA de Estados Unidos o la EMA europea.
Actualmente, el proceso de aprobación de la ANMAT (la agencia reguladora argentina) puede tardar entre 6 y 9 meses para medicamentos importados, y aún más para los de fabricación nacional. El Gobierno busca cambiar esto, asumiendo que si un producto está autorizado en mercados exigentes, debería ser considerado seguro en Argentina, lo que agilizaría y abarataría las importaciones.
Sin embargo, incluso con estas medidas, los laboratorios de India y China tendrían que contar con el aval de estas agencias internacionales para poder ingresar al mercado argentino, ya que la ANMAT aún requeriría inspeccionar sus plantas de producción.
En resumen, tanto Cristina como el Gobierno buscan reducir los altos costos de los medicamentos, pero con enfoques diferentes: Cristina apuesta por una mayor apertura a las importaciones, mientras que Sturzenegger y Lavigne intentan fomentar la competencia y transparencia en el mercado local.